Erase una vez un buen ilusionista. Un ser mágico capaz de parar el tiempo. El mago del tiempo, llegó a un reino muuuuuuy lejano, sacó sus artilugios de cuento, trazó unos virtuosos dibujos en el papel e hipnotizó a toda la corte. Los cortesanos dejaron de respirar, no oían, no veían mas allá de las escenas ilustradas. Los embelesó con cada detalle, con cada tono de color, y sin que se dieran cuenta, paró el tiempo. A los inocentes cortesanos, se les pintó una sonrisa bobalicona en la boca y sus ojos bailaban sin parar queriendo atrapar aquellos lugares maravillosos que nunca nadie antes había visto. Para rematar el truco, el prestidigitador del tiempo recogió las ilusiones, sentimiento, deseos, anhelos, virtudes, gracias y miedos del público y con precisas pinceladas, recreó unos personajes de fábula que cautivaron a los allí presentes. Eran personajes que ya estaban en la mente de los cortesanos encantados y el ilusionista no hizo sino rescatarlos del tiempo perdido y darles formas y colores, para devolvérselos en mágicas ilustraciones.
Cuidado cortesanos, que hoy tenemos en el reino a este ilusionista del tiempo que no dudará en maravillarnos con sus caprichosas ilustraciones. Toda una experiencia dejarse hipnotizar un rato por Iban Barrenetxea.
ibanbarrenetxea.blogspot.com.es/
te hemos oído decir que dibujas desde siempre ¿qué recuerdos tienes de esos momentos de dibujar?
Recuerdo claramente cómo me lanzaba a dibujar cada vez que veía alguna peli de aventuras, aquellas de piratas en blanco y negro con Errol Flynn. Y lo mismo sucedía cuando leía un libro que me gustaba. Para mí nunca se ha tratado de “dibujar por dibujar”, era más bien una forma de continuar con esas aventuras, de contarme cuentos a mí mismo.
la ilustración es trabajo, vocación, pasión ¿qué es lo que más te gusta de tu trabajo como ilustrador?
La ilustración de libros es un medio con unas posibilidades inmensas, así que creo que lo que más me gusta es el vértigo justo antes de empezar cada libro, cuando aún todo es posible. Después es cuando uno empieza a pelear con las propias limitaciones y llegan los ataques de histeria, pero antes de empezar, ¡qué maravilloso va a ser ese próximo libro!
sabemos que antes trabajaste como diseñador ¿cómo fue eso de pasarte al mundo de la ilustración?
Mi intención siempre fue que el diseño gráfico fuese algo temporal. Terminó siendo algo temporal que duró más de diez años. Siempre he sentido el impulso de dedicarme de una forma o de otra a la literatura. Durante esos años seguí dibujando y escribiendo de vez en cuando, pero sobre todo leía muchísimo. Mostraba lo que hacía en un blog y empecé a recibir llamadas de editores.
seguro que bebes de muchas fuentes y de muchos ámbitos pero ¿algunos referentes de la ilustración?
Muchos… pero si tengo que elegir siempre me quedo con Norman Rockwell, no sólo por esa técnica alucinante, sino por su forma de narrar por medio de las imágenes. Y también con Edward Gorey, me apasiona su universo tan personal.
sinceramente nos quedamos atrapados con la sutileza de tus personajes ¿cómo nacen esos personajes casi absurdos protagonistas esas escenas irónicas de tus ilustraciones?
Toda mi vida he sido un lector compulsivo. Mientras leo mi mente es una especie de sala de proyección donde los libros cobran vida con definición Blu-Ray. Veo los personajes, su vestuario y efectos especiales sin límite de presupuesto. A veces creo que he llegado a ver algún micrófono asomando por la parte superior. Al leer un texto hago una especie de casting mental en busca de ese personaje que me va a servir como marioneta para que haga lo que yo quiero. Después sólo tengo que intentar dibujarlo. Supongo que en definitiva es una mezcla de observación y de imaginación.
dices que podrías trabajar infinitamente ilustrando un libro ¿cuánto tiempo te lleva ilustrar un libro?
Cada libro me lleva exactamente todo el tiempo que me dan para hacerlo. «Bombástica Naturalis» me llevó casi un año, pero hoy en día algo así resulta impensable. Salvo contadísimas excepciones es casi imposible vivir únicamente ilustrando libros. Por lo general tardo unos tres meses con cada libro, y eso son dos meses más de lo que se debe tardar si tenemos en cuenta cómo funciona el frenético mundo editorial.
dentro de ese largo lapso creativo ¿cuál es tu proceso de trabajo?¿qué técnicas utilizas?
Es importante entender que para un ilustrador de libros dibujar es sólo la parte final del proceso. Lo principal es asimilar el texto, hacerlo propio, proyectar esas imágenes mentales, los personajes, la secuencia, los ambientes, pensar qué queremos decir, qué podemos añadir… Ahí es donde surge la ilustración, el resto es pura técnica, que en mi caso es siempre digital. Utilizo photoshop y una tableta wacom, pintando como si se tratase óleo o acrílico, incorporando alguna textura de telas etc… cuando es necesario. Es una técnica muy laboriosa pero que me permite trabajar los detalles, corregir y matizar hasta el infinito, como a mí me gusta.
vemos en tu blog que estás representado por Pencil Ilustradores ¿qué es Pencil Ilustradores?¿cuál es tu relación con ellos?
Se encargan de todos los aspectos prácticos de la profesión, contratos, promoción, etc… para que yo me pueda centrar en mi trabajo. Lo cual es estupendo porque para esas cosas soy un completo inepto.
poniéndonos soñadores ¿qué libro histórico te hubiera gustado ilustrar?
“La isla del tesoro”, “Las aventuras del barón Munchausen”… no sé… ¡muchos! Pero cada vez me apetece más centrarme en ilustrar mis propios textos.
desde tu perspectiva ¿cómo ves el mundo de la ilustración actual?
En la parte creativa es un momento fascinante, un hervidero de autores con un gran talento y ganas de explorar las posibilidades del medio. En el mundo editorial también ha surgido una generación de valientes editores independientes que están ahí porque adoran los libros, y están dispuestos a apostar por los libros ilustrados tanto infantiles como para adultos. Por otro lado, igual que sucede en cualquier otro ámbito, en general el panorama profesional, la parte práctica de la que depende que podamos seguir haciendo esto, está bastante feo.
la inspiración surge cuando menos lo esperas ¿una web y un libro que te inspire a la hora de crear?
Cuando se habla de inspiración siempre me suena a algo que viene flotando por el espacio e impacta con nosotros por accidente para regalarnos una idea. Hay quien piensa que si hubiese sido él quien recibiera el manzanazo en la cabezota en lugar de Isaac Newton, hubiese sido él mismo quien describiera la ley de la gravitación universal en lugar de Newton. Más que un libro o una web la “inspiración” surge del trabajo y el esfuerzo diarios. Las ideas —al menos para mí— pueden dispararse con cualquier tontería, pero después funcionan más como una bola de nieve bajando por una montaña que como un manzanazo. Creo que fue Picasso quien dijo que es mejor que la inspiración te encuentre trabajando.
para terminar ¿algún ilustre consejo para l*s estudiantes de diseño?
No sé si estoy cualificado para dar consejos, pero desde luego si hay algo que realmente ha supuesto una diferencia para mí en todos los sentidos es el hábito de la lectura. Leer y leer. Si tuviera que aconsejar algo a alguien, independientemente de si es diseñador, ilustrador o piloto de naves espaciales, es que lea buenos libros. Bueno, eso y que no utilicen la Comic Sans.
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