EL CICLO SUPERIOR DEL INSTITUTO USANDIZAGA FORMA A FUTUROS DISEÑADORES GRÁFICOS A TRAVÉS DE PROYECTOS REALES
Noticias de Gipuzkoa DONOSTIA, Texto: OIHAN VITORIA – Lunes, 11 de Junio de 2012 Fotos: Ruben Plaza
CURTIDOS en mil batallas. Así es como salen los estudiantes del módulo superior de diseño gráfico ubicado en el Instituto Usandizaga de Donostia al terminar el ciclo formativo. Después de dos duros años trabajando en tareas reales con asociaciones y organizaciones externas al centro, y un tercer último año para desarrollar el proyecto final, los alumnos logran ponerse a punto para enfrentarse al siempre férreo mundo laboral.
Según explica Jon Ander García, profesor del módulo, «los estudiantes salen preparados para trabajar en cualquier empresa, porque empiezan las prácticas desde el primer día y les exigimos un nivel que se aproxima cada vez más al ámbito profesional». Es por ello que, resulta «natural y coherente que en el ciclo se trabaje como en una empresa real».
Desde el punto de vista de Itziar Aranburu, profesora de proyectos de gráfica publicitaria, el modelo educativo vigente supone que los alumnos se enfrenten a problemas reales. Por una parte, «les establecemos estrictos plazos de entrega y presupuestos de verdad». Asimismo, «deben de trabajar constantemente con clientes», recalca.
El ciclo cuenta con un modelo de aprendizaje interdisciplinar, es decir, a lo largo del curso los alumnos se someten a distintas materias con el propósito de unir los conocimientos adquiridos en ellas en un proyecto que tendrán que desarrollar al final del año.
En ese sentido, los estudiantes se tienen que volcar en sus proyectos y aprender a adecuarse a todas las situaciones que puedan encontrarse por el camino. A raíz de eso, García indica que la motivación de los aprendices «es indispensable en un sector donde la exigencias de los clientes son altísimas».
El centro está inmerso desde hace varios años en una red de colaboración con diversas asociaciones e instituciones. «Cada vez son más los agentes sociales que muestran su interés en unirse a nosotros. Muchos de ellos tienen un importante vacío en lo que a diseño gráfico se refiere y nuestros alumnos les proponen soluciones», señala la profesora del módulo. Del mismo modo, estima que las relaciones entre las entidades sin ánimo de lucro y los estudiantes suelen ser óptimas y cercanas: «La mayoría de las organizaciones vienen con una idea
Además, Jon Ander García incide en que cuanto más elaborados estén los proyectos, mejores resultados obtendrán los alumnos «tanto académicamente como a nivel laboral»: «Una de las ventajas que tiene el curso es que todos los trabajos salen a la luz y la gente los ve. Es decir, no nos limitamos a presentarlos en clase». El profesor apunta que cada proyecto hace su propio camino fuera del instituto y algunos logran muy buenas críticas. En definitiva, el ciclo formativo sirve de escaparate tanto individualmente como en colectivo, tal y como subraya García: «Los estudiantes saldrán de aquí con un amplio currículum de proyectos que podrán mostrar allá donde vayan».
SOCIAL DESIGN
Nuevo modelo educativo
El módulo de diseño gráfico donostiarra posee desde hace cinco años el modelo denominado social design. Una nueva forma educativa que se basa en una formación a través de proyectos y procesos colaborativos. Tiene como principal objetivo introducir la vida real en la enseñanza, para ayudar a detectar, plantear y resolver los problemas reales de cada época. En cualquier caso, además de formar profesional, técnica y tecnológicamente a los alumnos, el curso tiene como finalidad «formar personas para ayudar a mejorar la sociedad».
De igual manera, trata de potenciar la actitud crítica y el trabajo en equipo entre los aprendices. García califica como «beneficioso» el modelo de aprendizaje bidireccional, «tanto para alumnos, como para agentes sociales externos».
El ciclo formativo lleva en marcha desde el año 2007 y cuenta con un total de 44 alumnos, por tanto, al concluir este curso saldrá la tercera promoción. Durante ese periodo, los alumnos han gestado numerosas campañas de comunicación y diversas propuestas de diseño gráfico. Tales como calendarios sobre la sostenibilidad, campañas contra la violencia machista, el racismo o la xenofobia, y multitud de exposiciones gráficas. Entre ellas, cabe destacar la exposición Lo juro por los Ramones, la cual consiguió una inmensa repercusión mediática.